Los hermanos menores de Lluvia Yareni, una niña de 8 años asesinada por su padrastro Abraham, de 48 años, y su madre Angélica, de 34, fueron forzados a enterrar el cuerpo de su hermana en su hogar.

Los menores no solo atestiguaron el feminicidio, sino que también sufrían violencia constante. Gracias a su testimonio, las autoridades detuvieron a los responsables. Desde hace tiempo, Lluvia Yareni era víctima de agresión sexual por parte de su padrastro, mientras su madre lo encubría.

El crimen ocurrió en noviembre de 2024, cuando Abraham presuntamente asesinó a golpes a la menor. Los vecinos, engañados por Angélica, creían que la niña había muerto por una enfermedad y estaba sepultada en un panteón de Cuautlita.

Sin embargo, durante una visita familiar, se descubrieron las condiciones insalubres y violentas en las que vivían los menores. Esto llevó a una denuncia ante el DIF municipal, que rescató a los niños y los puso bajo protección.

En entrevistas con el DIF, los menores revelaron que su padrastro y madre mataron a su hermana. El 14 de febrero, la Fiscalía General del Estado de Puebla cateó la vivienda, encontró el cuerpo de Lluvia Yareni y detuvo a los responsables.

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