Luis Ángel Dávila, presidente municipal de San Felipe Tepatlán, fue detenido el pasado domingo en el municipio de Chignahuapan, tras ser sorprendido conduciendo en estado de ebriedad y alterando el orden público en el centro del Pueblo Mágico. Aunque fue trasladado a los separos municipales, su detención sólo duró dos horas, lo que ha desatado una ola de críticas ciudadanas y cuestionamientos sobre el manejo del caso.
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La detención fue revelada por el propio alcalde de Chignahuapan, Juan Rivera Trejo, durante su conferencia matutina. En su intervención, aseguró que su administración no tolera actos fuera de la ley, dejando claro que el edil fue tratado como cualquier ciudadano.
“Un presidente municipal vecino manejando en estado de ebriedad. Inmediatamente a los separos, sin compromisos con nadie”, declaró Rivera Trejo.
No obstante, la brevedad del arresto ha provocado indignación en redes sociales, donde los usuarios califican el acto como una sanción simbólica y exigen consecuencias reales para funcionarios que infringen la ley.
Reportes extraoficiales apuntan a que Luis Ángel Dávila consumía alcohol dentro de su vehículo, el cual manejaba en sentido contrario, acompañado presuntamente por la diputada local Kathya Sánchez, quien sería su pareja sentimental. En el momento de la intervención policial, ambos intentaron evitar la detención aludiendo a una supuesta llamada al secretario de Gobernación, Samuel Aguilar Pala.
Aunque Rivera Trejo insistió en que su gobierno no encubre a nadie, evitó precisar las razones por las que el edil fue liberado tras apenas dos horas.
“Nuestro compromiso es con la gente, no con los intereses políticos”, subrayó.
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