México cumple medio siglo sin Juegos Olímpicos en básquetbol, pero el seleccionador nacional, Omar Quintero, niega que exista una crisis de formación de talento juvenil en el país.
Con apenas seis participaciones en Copas del Mundo, el país carece de un sistema consolidado de canteras deportivas o academias oficiales que potencien la aparición de nuevos talentos.
Quintero asegura que desde 2017, más de 25 jugadores menores de 23 años han debutado en selección mayor, y menciona a Karim López, Gael Bonilla y Adrien Porras como referentes.
“No es fácil llegar, pero hay cantera. Seguimos produciendo talento juvenil”, indicó. Sin embargo, reconoce que el modelo actual depende de esfuerzos individuales y no de una política deportiva nacional.
El entrenador lamenta que la Liga Nacional de Baloncesto Profesional (LNBP) no promueva academias ni limite la presencia de jugadores extranjeros, que hoy pueden ser hasta ocho por equipo.
Frente a ello, la selección recurre a visorías internacionales, talento universitario y a jugadores con doble nacionalidad para reforzar sus categorías juveniles.
En contraste, equipos como Diablos Rojos de Ciudad de México preparan su propia academia formativa, con planes de expansión. El proyecto sería presentado formalmente en noviembre próximo.
Su gerente, Nicholas Lagios, señala que “urge una cantera seria”, aunque acusa que ligas como la ABE impiden contacto de universitarios con equipos profesionales, lo que limita la detección de talentos.