Australia comprará 11 fragatas de guerra tipo Mogami, fabricadas por Mitsubishi Heavy Industries, en un acuerdo militar con Japón valorado en 6.000 millones de dólares, anunció el ministro de Defensa, Richard Marles.
El funcionario calificó la compra como “el mayor acuerdo en la industria de defensa entre Japón y Australia”, destacando su relevancia en la cooperación militar y la seguridad regional en el Indo-Pacífico.
Las fragatas Mogami, consideradas furtivas avanzadas, incorporan 32 celdas de lanzamiento vertical para misiles de largo alcance. La primera unidad será entregada en 2030, reemplazando a los buques tipo Anzac.
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Mitsubishi Heavy Industries ganó la licitación frente a la alemana ThyssenKrupp Marine Systems, consolidando a Japón como un actor clave en la exportación de tecnología militar avanzada.
Australia emprendió en 2023 una reforma militar profunda, incrementando su capacidad ofensiva para contrarrestar el poderío naval chino. Con estas adquisiciones, busca fortalecer su flota y la disuasión estratégica.
El ministro Pat Conroy aseguró que la compra “transformará la marina australiana en una fuerza más letal” y reforzará la seguridad nacional. Japón, por su parte, subrayó la importancia de la interoperabilidad militar.
El portavoz Yoshimasa Hayashi afirmó que el acuerdo refleja “la confianza en la tecnología japonesa y la cooperación en seguridad con Australia”, ambos miembros del grupo Quad, junto a Estados Unidos e India.
Este bloque regional fomenta seguridad marítima, desarrollo tecnológico y cooperación estratégica frente a desafíos en el Mar de China Meridional. Para Tokio, es un paso clave para ampliar alianzas militares.
La alianza Japón-Australia refuerza el eje de defensa frente a tensiones regionales, posicionando a ambos países como socios estratégicos ante la competencia geopolítica en Asia-Pacífico.
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