Una familia fue víctima de un asalto violento en el municipio de Coronango, perpetrado por un grupo armado. Este hecho desencadenó una serie de protestas ciudadanas por la falta de seguridad.
Los hechos ocurrieron la noche del jueves 7 de agosto, cuando varios sujetos irrumpieron en una panadería, donde amarraron a una mujer y su hija, y golpearon al hijo.
Los delincuentes robaron el vehículo familiar y huyeron.
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Un grupo de vecinos decidió bloquear el acceso al Complejo de Seguridad Pública de Coronango, exigiendo presencia policial y atención a sus llamados de emergencia.
Los manifestantes reclamaron directamente al secretario de Seguridad Pública Municipal, David Vargas, a quien responsabilizan de permitir la expansión de la delincuencia en el municipio.
En respuesta, el ayuntamiento blindó el complejo con elementos antimotines para evitar el ingreso de los inconformes, lo cual aumentó el descontento social.
Durante la protesta, los ciudadanos advirtieron que si no se atendían sus demandas, procederían a bloquear la autopista México-Puebla, lo que obligó a una reacción estatal.
La Secretaría de Seguridad Pública del Estado de Puebla (SSP) intervino para establecer una mesa de diálogo con los pobladores y ofrecer soluciones inmediatas.
Los ciudadanos solicitaron mayor patrullaje, una reestructuración de los mandos policiales y la destitución de David Vargas por omisiones reiteradas en materia de seguridad pública.
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