Cuatro poblanos
Cuatro hombres originarios de Puebla y reportados como no localizados, fueron identificados por las autoridades como parte de las víctimas decapitadas y cuyas cabezas fueron arrojadas en una carretera en los límites con Tlaxcala, junto con una narcomanta presuntamente firmada por el grupo criminal La Barredora. Una fuente ministerial confirmó a la Agencia Quadratín que se logró la identificación de Armando Trujillo Miranda, de 29 años y Ricardo Sánchez García, de 34 años, quienes desaparecieron en las colonias Azcárate y Santo Tomás Chiautla de la capital poblana, respectivamente. Se indicó que Armando contaba con una ficha de búsqueda, ya que fue visto por última vez el pasado 2 de agosto, mientras que Ricardo había desaparecido desde el 8 de agosto. Estos dos nombres se suman a los de Óscar Fernando Martínez y Pablo Guevara, quienes también desaparecieron en la ciudad de Puebla, contaban con ficha de búsqueda y están incluidos en la lista de víctimas identificadas. La mayoría desapareció hace 15 días, tiempo en el que se ignora qué ocurrió con ellos, cuando sus familias los buscaban y que ahora se suman a la trágica estadística de víctimas de la delincuencia organizada. ¿Será?
Amenaza digital
La periodista Carolina Fernández, directora del diario El Popular, denunció que este martes recibió al menos 500 llamadas telefónicas de acoso digital y amenazas, entre las 8:46 y las 14:00 horas, por parte de sujetos que le exigían “el pago de una deuda que no reconozco, supuestamente como aval solidario de una persona llamada Lilia Herrera Gómez”, como escribió en su cuenta de X, donde compartió las grabaciones de las voces de hombres con acento colombiano, además de los mensajes con advertencias de “levantar a la niña”, en los cuales también usaban palabras comunes del argot de aquel país sudamericano, como “pichula” o “parcero”. En dicha red social, la periodista pidió ayuda para saber dónde podían denunciar. En respuesta, la Secretaría de Seguridad Pública puso a su disposición el número 089 y le ofreció la atención especializada y acompañamiento de la Policía Cibernética, mientras que otros usuarios le sugirieron que bloqueara los números directamente desde la configuración de su celular. El caso de Carolina es ejemplo claro de la red de extorsionadores que operan en Puebla y el país, donde cientos de miles de personas caen en la trampa y terminan por entregar el dinero, por ignorar qué hacer o a quién acudir ante la inmisericorde insistencia de los delincuentes. ¿Será?
Total indiferencia
La asociación civil TAC, dedicada a la protección de los animales, mostró imágenes del cadáver de una perrita, que yacía sin vida junto a las rejas de la vivienda de sus amos, “condenada a la indiferencia, abandonada dentro de su propia casa, con los ojos abiertos, la cola enroscada y sin nadie que respondiera por ella”. Fue el mensaje escrito por los animalistas en redes sociales, donde informaron de los hechos a la Policía Municipal de Tehuacán, la Guardia Ecológica y la Policía Ministerial. Aunque no dieron a conocer el lugar de los hechos, por sigilo y respeto a las investigaciones, la asociación recordó que “un ciudadano no es autoridad”, aunque “un animalito dentro de un domicilio es considerado propiedad privada y únicamente la autoridad puede intervenir”, por lo que pidieron a los vecinos que denuncien cualquier caso parecido, antes de las mascotas sufran un trágico final. ¿Será?