Un ataque aéreo ruso en Kiev dejó al menos 15 muertos, incluidos cuatro menores, y afectó edificios residenciales y oficinas internacionales, informaron autoridades ucranianas.
El bombardeo ruso en Kiev ocurrió la mañana del jueves y se considera uno de los ataques más graves contra la capital ucraniana. Entre las víctimas fatales hay cuatro menores de edad.
Los impactos alcanzaron zonas céntricas, dañando la representación de la Unión Europea (UE) y la oficina del British Council, además de un edificio residencial de cinco pisos que colapsó parcialmente.
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Los socorristas ucranianos trabajan en la remoción de escombros, donde se cree permanecen atrapadas varias personas. Testigos narraron escenas de pánico mientras los habitantes corrían a refugios subterráneos y al metro para protegerse.
Una residente relató cómo los cristales estallaban a su alrededor durante las explosiones. Periodistas reportaron la caída de un misil abatido y el sobrevuelo de drones sobre la ciudad.
El ataque también dañó una escuela de preescolar y un centro comercial, lo que refuerza la gravedad del impacto en zonas civiles.