Aunque septiembre es el mes del testamento, solo el 23% de los capitalinos ha aprovechado este instrumento de previsión, señaló Felipe Carrasco Zanini, del Colegio de Notarios CDMX.
En todo México, apenas el 8% de los ciudadanos cuenta con un testamento, indicó el especialista, resaltando la baja cultura de planificación patrimonial en el país.
Durante la campaña de 2025 en la CDMX, el costo del trámite se fijó en 3,800 pesos (IVA incluido), cerca del 50% menos que el precio regular, mientras que en 2024 aumentó solo 100 pesos.
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En otras entidades, como el Estado de México, el precio es de 2,000 pesos, con un descuento adicional del 50% para adultos mayores y grupos prioritarios.
De enero a agosto se firman entre 10 mil y 15 mil testamentos mensuales fuera de campaña, pero en septiembre el flujo aumenta significativamente por descuentos y promociones.
Entre 2021 y 2024, la CDMX acumuló 158,809 testamentos, un número reducido frente a más de 9 millones de habitantes, según datos del Colegio de Notarios.
El impacto económico de no contar con un testamento es mayor: los procesos intestados cuestan entre 37 mil y 76 mil millones de pesos anuales, debido a litigios prolongados, congelamiento de bienes y pérdida de productividad.
Salvador Rotter Aubanel, del Colegio de Contadores Públicos, explicó que un testamento puede incluir acciones de empresas, derechos y tutores legales para hijos menores, reduciendo conflictos futuros y asegurando la estabilidad familiar.
El trámite requiere elegir notaría, hacer cita, aclarar dudas, firmar conforme a la voluntad y registrar el documento, con beneficios adicionales para adultos mayores, mujeres vulnerables y personal de salud.