El emblemático Paseo Bravo, recupera su esplendor. Con una visión de rescate patrimonial y fomento comunitario, el Gobierno de la Ciudad, ha concretado la rehabilitación integral de sus fuentes. Esta acción, enmarcada en la estratégica iniciativa “Fuentes que Brillan”, impacta positivamente la vida de más de 13 mil poblanos que a diario transitan o disfrutan de este vital pulmón urbano.
La intervención no fue menor. Se realizó una revitalización profunda de siete elementos clave: las fuentes Colonial, Circulares 1 y 2, Conchitas 1 y 2, Libre Expresión, Juan de Palafox y Mendoza y el icónico Tapete Paseo Bravo. Los trabajos abarcaron desde el mantenimiento integral de los sistemas eléctricos e hidráulicos, a menudo olvidados, hasta la sustitución completa de la iluminación ornamental y labores de pintura, devolviendo a cada estructura su diseño original y funcionalidad.
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Según el secretario de Servicios Públicos, Clemente Gómez Medina, la rehabilitación representa un esfuerzo integral para devolverle vida y seguridad a uno de los espacios más representativos de la capital. Subrayó que, mediante este tipo de estrategias, el alcalde fortalece la identidad y el sentido de pertenencia, generando comunidad en espacios dignos y plenamente iluminados.