El gigante farmacéutico Johnson & Johnson enfrenta una demanda colectiva en Reino Unido presentada por el despacho KP Law, que representa a más de 3,000 afectados que aseguran haber desarrollado distintos tipos de cáncer por el uso de talcos contaminados con amianto.
Según la querella, la empresa sabía desde hace más de 50 años que sus productos contenían fibras cancerígenas, pero optó por mantenerlos en el mercado entre 1965 y 2023. El monto reclamado podría superar los mil millones de dólares, una cifra que refleja la magnitud del daño.
Los demandantes reportan casos de cáncer de pleura, peritoneo y ovario, supuestamente vinculados al uso prolongado del producto, retirado del mercado británico en 2023, tres años después de su prohibición en Estados Unidos y Canadá.
Tras la separación de su división de consumo masivo en Kenvue, la farmacéutica sostiene que la nueva empresa heredó las obligaciones legales fuera de Norteamérica. Sin embargo, Kenvue insiste en que “años de pruebas científicas demuestran que el talco es seguro y libre de amianto”.
Cabe recordar que en abril de 2024, la justicia estadounidense rechazó una propuesta de 8 mil millones de dólares en indemnizaciones para resolver más de 90 mil demandas. Además, la OMS clasificó el talco como “probablemente cancerígeno” en julio de ese mismo año.
El caso abre un nuevo capítulo en la polémica historia de Johnson & Johnson, que ahora enfrenta una de las demandas más grandes de su historia por un producto icónico que alguna vez se asoció con la inocencia y el cuidado familiar.

