En medio de un imponente operativo de seguridad, Grecia Quiroz García, viuda del alcalde asesinado Carlos Manzo Rodríguez, inició su primer día como presidenta municipal de Uruapan, marcada por el dolor, la incertidumbre y la exigencia de justicia de toda una comunidad.
El municipio amaneció blindado por fuerzas del Ejército, Guardia Nacional y Policía Estatal, luego del asesinato del edil el pasado 1 de noviembre durante un evento público. Desde la noche del miércoles, convoyes federales arribaron al municipio para reforzar la vigilancia y garantizar la seguridad de la nueva alcaldesa.
En un mensaje difundido en redes sociales, Quiroz García expresó con firmeza: “Hoy, para muchos personajes políticos sería un día de felicidad; para mí, es un día difícil, porque quien debería seguir gobernando nuestro municipio es Carlos Manzo. Despertaron al tigre que Carlos tanto decía”.
Por motivos de seguridad, la alcaldesa despachó en reuniones privadas y se desconoce su ubicación actual, medida tomada para salvaguardar su integridad, según fuentes del propio Ayuntamiento. Su equipo de escoltas está conformado por entre 12 y 15 elementos federales.
La tensión social se refleja en las calles. Este jueves, Uruapan vive un paro total de actividades: cámaras empresariales, transportistas, comerciantes y organizaciones civiles se sumaron a una manifestación masiva para exigir seguridad, paz y justicia por el asesinato de Manzo Rodríguez.
El punto de encuentro fue la glorieta de McDonald’s, sobre el Paseo Lázaro Cárdenas, desde donde cientos de ciudadanos avanzaron hacia el centro histórico.
Entre los participantes se encuentran la Apeam, Canaco Servitur, Canacintra, así como las Juntas de Sanidad Vegetal de municipios vecinos. También se unieron hoteleros, restauranteros, transportistas y gasolineras, en una muestra sin precedentes de unidad y hartazgo ciudadano.
La jornada de protesta está programada de 8:00 a 17:00 horas, en la que los uruapenses claman por el fin de la violencia que ha sacudido al municipio en los últimos años.
En paralelo, colectivos estudiantiles y organizaciones sociales se pronunciaron contra la detención de un joven de la Facultad de Medicina, liberado anoche en Morelia, en un contexto que refleja la delicada tensión política y social que atraviesa el estado.
Con la voz entrecortada, Grecia Quiroz cerró su mensaje con un llamado a la esperanza: “Les pido que luchemos juntos, porque solo así sacaremos adelante a nuestro hermoso municipio”.
Uruapan, cuna del aguacate y de la fuerza productiva de Michoacán, hoy se detiene —pero no se rinde— ante el eco de una tragedia que exige respuestas.

