María Fernanda León denunció públicamente ser víctima de violencia familiar por parte de su exesposo, identificado como Israel N, así como de presuntas irregularidades, actos de intimidación y posibles hechos de corrupción dentro de la Fiscalía Especializada en Investigación de Delitos de Violencia de Género contra las Mujeres y del Poder Judicial del Estado de Puebla.
Según su testimonio, difundido a medios locales, el 1 de diciembre de 2024 sufrió una agresión física por la cual presentó una denuncia formal. Advirtió que, pese a acudir a diversas instancias, su carpeta de investigación no avanzó como establece la ley.
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Posteriormente, afirmó que su exesposo presentó una denuncia en su contra por lesiones, la cual ella califica como falsa, argumentando que lo “rasguñó” mientras intentaba defenderse de la golpiza que, presuntamente, había recibido.
De acuerdo con María Fernanda León, esta carpeta “fabricada” avanzó con una rapidez inusual: fue integrada en un mes por la agente del Ministerio Público, Karen Elizabeth Velazco Ortiz, y judicializada el 25 de enero de 2025, ante el juez de control, David Rodríguez González.
En su relato, la denunciante dijo que cada vez que intenta presentar pruebas para demostrar que ella es víctima de agresiones, otros ministerios públicos se niegan a recibirlas. También acusó que desaparecieron las valoraciones médicas y psicológicas que la propia Fiscalía le practicó y en las que, aseguró, se acreditaba la violencia de la que había sido objeto.
Además, la posible víctima de violencia familiar señaló amenazas del investigador de la Fiscalía de Género, José María Barragán Baruch, quien, durante una reunión en la que también estuvo presente la fiscal de Género, Karla Michelle Salas, el funcionario le advirtió que, si no seguía sus “recomendaciones”, se giraría una orden de aprehensión en su contra y le quitarían a su hijo.
“Hoy veo cumplida su amenaza”, afirmó, al señalar que el juez David Rodríguez González emitió una orden de aprehensión en su contra el 27 de octubre, por supuestamente haber agredido a su exesposo, algo que considera “totalmente irreal” debido a la diferencia física entre ambos.
“Hoy corro el riesgo de ser privada de mi libertad por no ceder a lo que mi violentador quiere”, expresó María Fernanda León en su denuncia.