Lo que ha sido el caso de Cecilia Monzón volvió a presentarse, el Juzgado Quinto de Distrito en Materia Penal en Puebla otorgó una suspensión definitiva al amparo promovido por Javier López Zavala, acusado por violencia familiar y feminicidio.
Este hecho fue cuestionado por la familia de la abogada, ya que aseguran que la resolución —emitida el pasado 27 de noviembre— contraviene la Ley de Amparo y representa un nuevo obstáculo procesal.
Pero que implica este hecho, pues nada más ni nada menos que que permite detener temporalmente los efectos de la lectura íntegra de la denuncia que Cecilia presentó en vida, a pesar de que esa lectura ya se realizó el 21 de mayo de 2025 por orden del Tribunal de Apelaciones del Poder Judicial de Puebla.
Y nuevamente la familia condena el hecho, pues “entorpece el acceso a la justicia y prolonga la impunidad”, ya que consideran que impediría que este 2025 se logre una sentencia firme en el caso de violencia familiar a pesar de que es un acto consumado.
Esta recurrente dilación del caso muestra dos cosas, que el sistema judicial da un ejemplo de trabajo que hasta el momento huele a que será uno de los juicios más largos llevados en la entidad. ¿Será?
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Y en buenas noticias, que demuestran que cuando se quiere se puede, está el anuncio de que en la entidad poblana se han practicado 427 Interrupciones Legales del Embarazo (ILE), garantizando así la preservación de la vida de la persona gestante. El logro es de todos, de los diputados locales que aprobaron la despenalización del aborto hasta las 12 semanas de embarazo y de los cuerpos médicos de hospitales públicos que hacen valer el derechos de las mujeres a decidir sobre su cuerpo. Ojalá y los diputados se den cuenta de que si se lo proponen pueden dar excelente resultados, no como en el primer año de la LXII Legislatura, que a decir del Observatorio Legislativo de la Universidad Autónoma Popular del Estado de Puebla (UPAEP) está reprobada.
El diagnóstico es algo que tiene que analizarse con todas las variantes, pues de ser real es muy grave, pues politólogos que realizaron el análisis concluyeron que el Congreso local carece de autonomía frente al Gobierno, aunque en el vox populi se comenta que es una característica de las bancadas morenistas de todo el país, es momento de que los diputados tomen cartas en el asunto y ahora si quieran legislar por las personas que con su voto los pusieron en ese puesto, solo falta que aplique la máxima de “querer es poder”. ¿Será?