Con la llegada de diciembre, miles de trabajadores en Puebla se preguntan cuánto recibirán de aguinaldo y si existe alguna razón legal por la cual sus empleadores podrían reducir el monto. Aunque el artículo 87 de la Ley Federal del Trabajo garantiza este derecho y prohíbe modificaciones arbitrarias, sí existen escenarios en los que la ley permite descuentos justificados, siempre bajo normas estrictas y verificables.
Uno de los casos más comunes es el pago de pensión alimenticia, donde una orden judicial autoriza retener del aguinaldo entre 30% y 50%, ya que este ingreso forma parte del salario anual del trabajador. Otro escenario frecuente son los adelantos de sueldo o préstamos internos, cuya deducción es válida únicamente si el trabajador lo autorizó por escrito, exigencia clave para evitar abusos.
También se contemplan descuentos por daños comprobables a herramientas o mercancías, pero la ley impone límites: debe existir una investigación interna, aceptación del trabajador y un monto proporcional que no exceda un día de salario por semana. Aunque estos ajustes suelen aplicarse al sueldo, pueden cargarse al aguinaldo si el empleado lo firma de conformidad.
Otro punto crítico para diciembre es la retención automática por créditos Infonavit o Fonacot, donde los convenios establecen que parte del aguinaldo se destine al pago del financiamiento. Por ello, expertos recomiendan revisar contratos y estados de cuenta para evitar sorpresas financieras.
Además, la ley contempla posibles descuentos por ISR cuando el aguinaldo rebasa 30 UMAs, así como cuotas sindicales o aportaciones a cajas de ahorro. En la mayoría de estos casos, la autorización del trabajador sigue siendo un requisito fundamental.
Para los poblanos, entender estos escenarios no solo evita confusiones, sino que se vuelve clave en un contexto económico donde cada peso cuenta y los ingresos decembrinos representan un respiro indispensable para miles de familias.