El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, dejó entrever una posible evolución de la regla del fuera de juego durante el World Sports Summit de Dubái, destacando ajustes orientados a un juego “más atractivo”.

Infantino declaró que el objetivo es hacer el fútbol más ofensivo, resaltando que las interrupciones deben reducirse para mantener fluidez en el espectáculo deportivo.

Actualmente, la regla indica que existe fuera de juego cuando el delantero está por delante del último defensor o en la misma línea, lo cual genera decisiones milimétricas mediante tecnología.

El dirigente adelantó que, “quizá en el futuro”, el jugador deberá estar completamente por delante para ser sancionable, evitando infracciones por piernas o brazos adelantados.

Este posible cambio beneficiaría a los delanteros, dando más margen en jugadas ofensivas y evitando anulaciones por diferencias mínimas.

La propuesta cuenta con el apoyo del francés Arsène Wenger, exentrenador del Arsenal y actual director de desarrollo del fútbol en FIFA, quien busca dinamizar el juego global.

La regla modificada ha sido probada en torneos juveniles, permitiendo evaluar su impacto en ritmo, goles y decisiones arbitrales, según fuentes del organismo.

Sin embargo, el proyecto requiere aprobación de la IFAB, entidad que regula las reglas del juego. Su reunión anual será el 20 de enero en Londres, donde podría discutirse formalmente.

Tras la deliberación, cualquier cambio necesitaría una validación final de FIFA, antes de implementarse de manera oficial.

De acuerdo con el diario español AS, la modificación podría entrar en vigor la próxima temporada, aunque parece poco probable su aplicación para el Mundial 2026 en Estados Unidos, Canadá y México.

La propuesta refleja una tendencia hacia un fútbol con mayor espectáculo, goles y decisiones menos sujetas a tecnología y polémica.

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