Por Mario Galeana
Los migrantes poblanos que radican en Estados Unidos “no son delincuentes, no son narcotraficantes, no son criminales, ni transgresores de la ley”, aseguró el titular de la Secretaría General de Gobierno (SGG), Diódoro Carrasco Altamirano.
Tras la reunión entre el candidato republicano al gobierno de Estados Unidos, Donald Trump, y el presidente Enrique Peña Nieto, Diódoro Carrasco dijo que la “boyante economía” estadounidense no podría entenderse sin la mano de obra de los trabajadores migrantes poblanos y mexicanos.
“La carencia de documentación no tipifica delitos. No debe ser estigma para generar culpabilidades inexistentes, ni imputaciones que sólo responden a la mezquindad de algunos intereses políticos en los Estados Unidos”, dijo ayer el secretario de Gobierno en el Congreso del Estado.
Carrasco Altamirano informó que el gobierno del estado tiene registro de por lo menos un millón y medio de poblanos radicados en Estados Unidos, lo cual “tiene un efecto virtuoso, al derramar recursos a través de las remesas que envían a las familias que permanecen en nuestro suelo”.
“Los trabajadores migrantes son una fuerza activa y creativa que, hoy en día, padece amenazas a su estabilidad”, apuntó, en referencia a las declaraciones del candidato del Partido Republicano.
Por su parte, el titular de la Coordinación Estatal de Asuntos Internacionales y Apoyo a Migrantes (CEAI), Miguel Ángel Hakim Simón, reveló que se tiene conocimiento de que 60 por ciento de los poblanos asentados en Estados Unidos radica en Connecticut, Nueva Jersey y Nueva York; en tanto, indicó, se desconoce la situación del resto de los compatriotas.
Por tal motivo, el Congreso del Estado, el Consejo Estatal de Población y la CEAI firmaron un convenio para investigar la situación de los migrantes poblanos asentados en Estados Unidos, a fin de hacer las gestiones correspondientes para cubrir sus mayores carencias.
Durante la firma de convenio, el líder migrante y presidente del Consejo Binacional de Organizaciones Comunitarias en Los Ángeles, California, Roberto Bravo, externó su rechazo a la visita que hizo el magnate Donald Trump al nuestro país.
“¡Los migrantes manifestamos nuestro repudio a la visita de Trump!”, gritó, mientras la diputada Maritza Marín Marcelo, presidenta de la Comisión de Migración, daba un discurso en la tribuna legislativa.
Bravo, quien radica en Estados Unidos desde hace 30 años, señaló que el candidato republicano mantiene un discurso de odio que ha incrementado la discriminación en suelo norteamericano.
A su parecer, sin embargo, el rechazo hacia las declaraciones de Trump ha servido como método de unificación entre los mexicanos que radican en Estados Unidos.
“Allá hay empresarios poblanos, gente que trabaja en el campo, en la construcción, en los restaurantes. Los gringos son los jefes, los que coordinan el trabajo, pero no los que lo hacen. Nosotros sí. Sería un error expulsar a los migrantes de Estados Unidos. Es lo que no entiende el señor Trump”, declaró.