La Vida En Vino Y Otras Cosas

Por Sommelier Michelle Carlín / @purpleandwine

 

La tendencia de comer mejor, de disfrutar una vida equilibrada y en armonía, está en todas partes, evolucionando en todo momento por la necesidad de regresar a las raíces de lo que es sano y estar en constante sincronía con el ambiente.

En el caso de los vinos existen corrientes que han ganado muchos adeptos; éstas no son nuevas, ya que han surgido años atrás y se han pulido con el crecimiento de la industria, derivando en una agricultura consciente y productiva. La forma de reflejarse en los vinos de diferentes países productores es mencionando  certificaciones orgánicas y biodinámicas que pueden hacer referencia al trabajo en el viñedo y/o la bodega.

 

¿Qué es un vino orgánico?

Hay que distinguir que un vino puede ser con viticultura orgánica y/o  elaboración orgánica. Ambas se enfocan básicamente en disminuir al máximo el uso de químicos en sus diferentes fases de elaboración, lo que permite a los productores, dependiendo del país que se trate,  accesar a certificaciones internacionales válidas para diferentes mercados. Para estar seguros de qué tipo de vino estás consumiendo es importante analizar la etiqueta; en muchos casos indica “vino orgánico” o “vino con uvas orgánicas”.

 

¿Que es un vino biodinámico?

El biodinamismo es una corriente creada por Rudolf Steiner, que toma la viticultura orgánica y la lleva a un nivel más espiritual permitiendo que muchos viñedos en el mundo se inscriban a esta categoría, contando con un número actual de más de 400 miembros que pueden avalarse por la Asociación Demeter.

Este movimiento aplica a la naturaleza acciones ecológicas, energéticas y espirituales basándose en los astros y las estaciones del año muy a la usanza del inicio de la agricultura, sólo que respaldado con los estudios realizados en 1924 para el biodinamismo. Para llamarse vinos biodinámicos deben usar las nueve  preparaciones disponibles para el viñedo, las cuales son usando en muchos casos intestinos de animales, osamentas, flores, estiércol, etcétera.

En ambos casos, el uso de prácticas orgánicas y biodinámicas ha reflejado –según estudios– una estabilidad en el viñedo incrementando el equilibrio del tamaño de los racimos, salud de las vides y disminución de enfermedades, respaldando el uso de estas prácticas; sin embargo, con respecto a los vinos aún existe mucho debate sobre si estas prácticas mejoran o no sensorialmente a los vinos en la cata.

Sin embargo, el equilibrio que dota al entorno hace que se siga usando de forma  constante en el viñedo; por supuesto, se ha vuelto un gran argumento de venta y vale la pena consumirlos conociendo un poco más su origen.biodinamicos

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