La Entrega
Por Adrián Ruíz/ruizdur@
Un aviso contundente a los priistas poblanos llegó del cielo. El mensaje claro y conciso fue para quienes levantaron la mano antes de tiempo. Los suspirantes para las elecciones del 2108, serán simples espectadores. El destino de la misiva acarreó silencio de quienes albo-rotaron el gallinero, sin autorización alguna.
Los ilusos que pensaron tener posibilidades de asumir la gubernatura poblana se equivoca-ron. La llamada de atención fue general. "Si quieren conservar sus actuales cargos, traba-jen porque corren riesgo de perderlos".
Uno de los que se movió con anticipación por engaños que tenía méritos como subsecreta-rio de la Sedatu, Juan Carlos Lastiri Quiroz, resultó la principal víctima. Alguien le hizo creer al oriundo de Zacatlán que gobernar Puebla, es como administrar su rancho de To-matlán. Y la realidad es tan lejana como sus posibilidades de ser el elegido.
Contar con el cobijo de su jefa Rosario Robles, es diferente a tener la bendición de quienes toman las decisiones en las "grandes ligas" de la política mexicana. Lastiri Quiros, llegó a la subsecretaría gracias a su cercanía con la titular de la Sedatu. Sus méritos no le alcanzan ni para la presidencia municipal de Zacatlán.
El ímpetu que lo llevó a promocionarse en revistas, periódicos y espectaculares con la ab-surda idea de ser el "bueno" para el periodo del 2018, quedará en el olvido. El alto que le marcaron no tiene vuelta atrás. Si Juan Carlos quiere sobrevivir en la política local -porque en la nacional hasta ahí llegó-, deberá sumarse al elegido por su partido.
Un ensayo infructuoso y costoso fue la burda idea de Lastiri para acaparar la atención. Nadie ni siquiera la escasa gente que lo conoce tomó en serio su propuesta. Por supuesto en el PRI poblano, tampoco lo vieron como un serioy real aspirante.
También los restantes priistas con sueños similares a los de Lastiri, recibieron el aviso opor-tuno. La órden fue tajante. Ante la crisis por la que atraviesa el otrora partidazo invencible, todos los militantes deben buscar la unidad para elegir a uno con posibilidades reales ¿quién?
Acaso existe entre los priistas un personaje que goce de la simpatía y sobre todo la con-fianza de los poblanos. Por el momento no se vislumbra a nadie.
La baraja priista esta desgastada y sin ases para competir. Aunque tampoco los partidos competivos en Puebla, pueden presumir de por lo menos contar con una carta valiosa bajo la manga.
En los otros partidos también empezaron a moverse algunas piezas. Sobre todo quienes el pasado reciente disputaron el lugar a Antonio Gali, para la presidencia municipal.
Las giras al interior del estado son constantes. Sin embargo como en el pasado no logran entrar en el gusto de los poblanos. Las cosas lucen parejas en los diferentes frentes por lo que será complicada primero la elección interna de sus candidatos.
El tiempo es corto aunque faltan casi 2 años para el momento crucial. Si el PAN pretende mantener el poder, deberá impulsar a un candidato que acepten los poblanos. Los mencio-nados hasta ahora son vistos con desconfianza por tratarse de pretendidas imposiciones.
Sin duda para todos los partidos será un reto difícil de enfrentar. Cuando el partido ha en-trado a la recta final del segundo tiempo, los equipos participantrs se han quedado sin rele-vos capaces de inclinar la balanza a su favor.
En las más recientes elecciones la gente se inclinó por la persona y dejo de lado la bandera política. En estos momentos las dos partes son inexistentes en Puebla.
Sólo que ocurra algo extraordinario o la postulación de candidatos con credibilidad, salvará las próximas elecciones.
