Neftalí Coria

Mi amigo Jim

Para Alejandro Aguilera Coria La imaginación es ligera, veloz, sorprendente y podemos comprobarlo con cierta facilidad al responder la pregunta: ¿Dónde viven los personajes de

La narrativa de la muerte

La vida parece mucho más fácil hoy día, aunque la muerte, no solo lo parece, sino que lo es. De la vida tengo mis reservas.

La muerte es una cosa más

La muerte está en el pensamiento constantemente, es una recurrencia que se ha multiplicado y ha crecido por estos días. La pulsión de muerte es

Peor que un palo seco

Estás peor que un palo seco –le dijo en tono de burla, una mujer flaca a otra tan flaca como ella– deberías curarte. Las dos

Nada ha de cambiar

Advierto que la ciudad donde vivo está más suelta y más expósita ante este monstruo invisible en el que se ha convertido el maldito virus

Puros muertos se ven

Dice el hombre de la carnicería, que todo esto está triste, que “puros muertos se ven”, que el gobierno no ayuda, que debería preocuparse por

Ya vemos virus con tranchete

A veces no se sabe qué pensar y la incertidumbre no se quita, ni es fácil dejar de lado las imágenes de esta amenaza que

Gracias Oscar Chávez

Para Ana Maria Fowler. Los hombres honrados también mueren, ya lo sabemos. Los hombres congruentes también mueren, los hombres que entregan su vida a sus

No seremos los mismos  

El miedo discreto, la incertidumbre ostensible y el acorralamiento en el que tiene a la ciudad un virus que cada vez lo presentan más cercano

Al miedo le da la luz del sol

La noche fue airosa. La ciudad en la quietud sometida, sus luces encendidas. Imaginé si la ciudad se apagara como en un cuento de Maupassant,