El Observatorio Ciudadano de Derechos Sexuales y Reproductivos AC. (Odesyr) urgió a los diputados locales a llevar al Pleno del Legislativo, el análisis y puesta a votación de la Ley para la Protección del Consumo y de la Exposición al Humo y Emisiones de Tabaco y de otros Productos Análogos del Estado, la cual fue aprobada en comisiones desde diciembre de 2019.

Los activistas acusaron un retraso de discusión de la iniciativa, ante un posible conflicto de intereses por parte de legisladores como Juan Pablo Kuri Carballo, quien aseguraron es propietario de casinos, en cuyos espacios cerrados quedaría prohibido fumar.

El Coordinador de desarrollo institucional del Odesyr, Brahim Zamora Salazar, sentenció que el diez por ciento de las personas que enferman de las principales cuatro causas por fumar, no son fumadores, tal es el caso de los empleados del sector restaurantero, de bares y casinos que están expuestos a más de ocho horas al humo de cigarro.

Ante ello, el activista destacó la importancia de llevar al Pleno del Legislativo local, la referida ley que garantizaría espacios cerrados 100% libres de humo de tabaco, tal y como ha ocurrido recientemente en otros estados como Yucatán. En total, de las 32 entidades federativas, únicamente, catorce han apostado por aprobar leyes referentes a la protección de la salud de personas no fumadoras que están expuestas al humo del tabaco.

Lo anterior, luego de que el 10 de diciembre de 2019 y por unanimidad de votos, las comisiones de Gobernación y Puntos Constitucionales y de Salud del Congreso de Puebla, aprobaron el dictamen para la expedición de una nueva ley relacionada con el consumo de tabaco en espacios cerrados, con multas para quien violara la norma de entre ocho mil —o 36 horas de arresto— y trescientos mil pesos para ciudadanos y establecimientos, respectivamente.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), en México mueren aproximadamente 7 millones de personas anualmente por enfermedades asociadas al consumo de tabaco; a nivel local del 2011 al 2016, la edad de inicio del consumo de tabaco se redujo de 14 a 11 años, y la capital poblana fue la ciudad que tenía más jóvenes fumadores en todo el país, con base a datos del Odesyr. 

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