Mucho ruido en la Fiscalía General del Estado.
La presencia de Elia Tamayo, madre del menor muerto en Chalchihuapan en julio de 2014 por un artefacto que le hizo blanco en la cabeza, en la Fiscalía General este lunes, generó terror entre los implicados en el caso de la muerte de quien es ese entonces tenía 13 años de edad.
De los tres “altos mandos” señalados de haberse beneficiado del clima de impunidad que prevaleció en el régimen del PAN entre 2011 y 2017, sólo uno de ellos se mantiene en la esfera pública a través de la publicación de artículos sobre seguridad, expuesto por el juicio que enfrenta Genaro García Luna en una corte federal en Nueva York por colaborar con el cártel de Joaquín El Chapo Guzmán Loera.
¿Será?
Ricardo Anaya y su “oposición selectiva”.
Y ya que se habla de injusticias en contra de la niñez poblana, propiciada o ninguneada por los regímenes del Partido Acción Nacional, vale la pena recordar a Ricardo Anaya Cortés, ahora que regresó a la escena política para clamar por la salud de una niña originaria de Zacatlán, que mucho hubiera ayudado hace años.
No está nada mal que recrimine a quien haya que hacerlo, sólo que esa misma energía hubiera ayudado para condenar el crimen atribuido por sus correligionarios en Chalchihuapan cuando él era presidente interino del PAN entre 2014, fecha del infanticidio y 2015. O es desmemoria intencional.
¿Será?
¿Y el regreso en el Congreso, apá?
En el Congreso de Puebla simplemente se llevaron al cajón de asuntos sin importancia el acuerdo que los propios legisladores emitieron para el regreso a trabajar de manera presencial a partir del lunes 21 de septiembre, con un aforo de hasta 30 por ciento.
Es simplemente inexplicable, a menos claro, que la falta de observancia del documento publicado, haya obedecido a la intención de evitar un encontronazo en el pleno de la Cámara a la hora de votar la desaparición del Cabildo de Tehuacán, como ya estaba previsto desde este domingo que sesionó la comisión respectiva.
¿Será?