Los grupos en pugna por el control de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP) han decidido emprender un litigio fuera de los juzgados: en los medios de comunicación.

Durante la última jornada, información encontrada sobre la trama por los bienes de la Fundación Jenkins, que implican a la UDLAP, ha sido vertida en espacios informativos con las versiones de los bandos en disputa.

Por ejemplo, temprano por la mañana los nuevos administradores afirmaron que la Interpol emitió una ficha roja en 190 países para localizar a los integrantes de la familia Jenkins de Landa, acusados por lavado de dinero y fraude.

A través de un comunicado, señalaron que las personas buscadas a petición de la Fiscalía General de la República (FGR) son Elodia Sofía de Landa Irizar de Jenkins, Roberto, Juan, Margarita y María Elodia de apellidos Jenkins de Landa.

Las órdenes de aprehensión, presuntamente liberadas por un juez de control federal con residencia en Almoloya de Juárez, Estado de México, y por un juez penal, también serían para Virgilio Rincón Salas, Alejandro González Muñoz y Carlos Román Hernández, quienes son abogados de la familia.

Lo anterior fue desmentido por la Fundación Mary Street Jenkins, la cual informó que no existe evidencia, hasta el momento, de que la familia Jenkins de Landa y sus abogados sean buscados por la Interpol.

De acuerdo con la Fundación, “no existe evidencia de que tal información sea verídica”.

“Corresponderá a la Interpol precisar la veracidad de dicha información y señalar si alguien está usurpando su nombre para propagar infundios que se han hecho circular de forma anónima entre los medios de comunicación, evidenciando una intención difamatoria para desviar la atención de la opinión pública sobre el desacato a la orden judicial federal que obliga a devolver las instalaciones universitarias ilícitamente tomadas por el estado de Puebla”, consideró.