Las medidas dictadas para garantizar la seguridad en el Estadio Cuauhtémoc son perfectibles, además de que fueron acordadas con la directiva del Club Puebla, aseguró el gobernador, Miguel Barbosa.

Destacó que habrá restricciones en la venta de alcohol, monitoreo total del inmueble y la instalación de un juzgado cívico móvil durante los partidos.

Las medidas son para fortalecer las medidas de seguridad y de protección civil, antes, durante y después de cada encuentro.

También se contempla un aumento en el número de policías estatales y municipales, además de guardias privados.

Además, se determinó la creación de un reglamento para palcos y plateas, junto con la prohibición de que los grupos de animación de los visitantes ingresen al estadio. Por su parte, los animadores de La Franja estarán en la localidad de Rampa Sur, donde no habrá menores de edad.

Autoridades dieron a conocer que se restringirá la venta de cerveza y bebidas alcohólicas, y se eliminarán sus promociones.

A todo lo anterior se sumará el reforzamiento de la videovigilancia a través del Centro de Mando, la identificación de los aficionados y la implementación del sistema de reconocimiento facial.

Finalmente, se instalará una mesa de trabajo entre el Club Puebla, Policía Estatal, Policía Municipal, Protección Civil, Cuerpos de Bomberos y las empresas de seguridad privada y servicios prehospitalarios contratadas por la directiva.