La exalcaldesa de Puebla, Claudia Rivera Vivanco y la viuda del exgobernador Miguel Barbosa Huerta, Rosario Orozco Caballero protagonizaron una pelea de comunicados vía redes sociales, donde se lanzaron señalamientos y hasta llegaron a las ofensas tras las declaraciones de la expresidenta municipal de una supuesta campaña de desprestigio. 

En su conferencia semanal, Rivera Vivanco se refirió al proceso penal que se le seguía por cometer el delito de discriminación contra la exconsejera jurídica del Ayuntamiento, Yasmín Flores Hernández, y afirmó que se trata de un plan orquestado por el difunto Miguel Barbosa. 

Al respecto, la morenista acusó que, desde que Barbosa Huerta era gobernador y ella alcaldesa, se orquestaron ataques en su contra, así como una campaña negra para desprestigiarla y al gobierno que ella encabezaba. 

“Estos ataques fueron orquestados e iniciados por voluntad del exgobernador del estado al no haberme doblegado, ni haber aceptado la servidumbre con la que quería someterme”, denunció Vivanco.

Más tarde, Rosario Orozco emitió un comunicado donde señaló que Rivera Vivanco tiene las manos llenas de corrupción y por ello busca pretextos para justificar el repudio social con el que se carga.

Acusó que en las elecciones de 2021, cuando la exacaldesa buscó su reelección, arrastró a la derrota electoral a los abanderados de Morena de la zona conurbada, producto del mal manejo y actos irregulares dentro de su gestión que comenzó en 2018.

Orozco Caballero acusó a Rivera Vivanco de manejarse de forma “cínica”, pues la culpó de pactar con morenovallistas, esto en referencia al caso de Yasmín Flores donde el juez determinó no vincular a proceso a la expresidenta municipal, pese a reconocer que sí había un delito.

“El cinismo con el que ahora se mueve la señora solamente refleja que ha vuelto a pactar con morenovallistas, pues los problemas judiciales se están volviendo a arreglar al estilo más corrupto”. 

Una hora después, la exalcaldesa publicó un hilo en sus redes sociales, ahí, aseguró que la carta de Orozco Caballero es una muestra de frustración por parte del grupo que ha orquestado los ataques en su contra.

Aprovechó para contrastar su gobierno con el del extinto Barbosa Huerta, destacó que terminó con la deuda de la ciudad, redujo 40% la incidencia delictiva, además de tener un récord de obra pública.