El club Cruz Azul Femenil volvió al Estadio Azteca para disputar la jornada 5 de la Liga MX Femenil, y lo hicieron con una vitalidad contagiosa, pues no jugaban en este recinto desde octubre de 2022, cuando disputaron el partido de cuartos de final frente al cuadro de Chivas. Esto, luego de que la semana pasada en la jornada 4 perdieran su racha de tres victorias consecutivas frente al Fútbol Club Juárez Femenil.

En contraste, las “Rayadas” de Monterrey llegaron con el invicto intacto al “Coloso de Santa Úrsula”, luego de un empate y tres victorias al hilo, la última de ellas ante las “Rojinegras” por un marcador de 2-0.

En punto de las 11:20 horas, el club Monterrey saltó a la cancha para el calentamiento previo. Sólo unos minutos después, y bajo el cobijo de algunos aficionados celestes que tuvieron la oportunidad de estar en cancha, salieron las jugadoras del Cruz Azul.

A escasos cinco minutos de este comienzo, las locales no cesaban de una alta presión sobre el terreno de las visitantes. Sin embargo, un balón recuperado por Rayadas en el mediocampo celeste, culminó en un contraataque que, fortuitamente, no fue problema para la defensa.

Cerca de los veinte minutos de juego, pese al aparente dominio de las Azules, las Rayadas ya se habían adueñado del marcador por una ventaja de dos tantos. Pese a ello, no se percibían ánimos de derrota en el bando de las locales.

Minutos antes de que terminara la primera mitad, las Azules lograban contener esa desventaja en la pizarra. No se echaron atrás, adelantaron líneas y el cambio de banda de Norma Palafox dio cierto dinamismo, y fue éste más evidente por la momentánea inestabilidad de las Rayadas, empero, no fue suficiente para que las Celestes acortaran la distancia en el marcador. Y, para su mala fortuna, en el agregado de la primera mitad, otro gol de las de Monterrey puso el 0 a 3.

Entre ánimos candentes por un arbitraje errático y luego de una primera mitad desafortunada para las de La Noria, las y los aficionados de la Máquina seguían llegando. A tal grado que, según se corrió una voz entre los asistentes, tuvo que abrirse otra sección dentro del recinto, pues no esperaban contar con esa asistencia. Al tiempo, por el altavoz del lugar se dio a conocer que el próximo encuentro del club Cruz Azul Femenil también se desarrollaría en el Estadio Azteca, contra el Guadalajara, el día lunes 21 de agosto.

Ya con el esférico girando en la parte complementaria, se anunciaron dos cambios por parte de las locales y uno para las visitantes. Tan sólo unos minutos después, con las Rayadas tratando de finiquitar el encuentro, ‘Burky’ tiró al segundo palo y el balón se fue por un costado.

Tras quince minutos de este tiempo, donde ya ambas escuadras habían llegado a las últimas líneas, no lograban capitalizarse ninguna jugada de peligro.

Como respuesta a las modificaciones de las de Monterrey, y debido a su declive en dinamismo e intensidad, la Máquina Femenil se apoderó por unos instantes del encuentro. El gol para las locales, sin embargo, no se hizo presente.

Agotado el tiempo reglamentario, ya en últimos instantes del agregado y con un juego más bien trabado por los esfuerzos y el cansancio, se terminó dio el silbatazo final cerca de las 14:00 horas.

Con esto, las Rayadas consiguen alargar el invicto intacto e insisten en continuar imbatibles. En contraste, el club Celeste acumula ya su segunda derrota al hilo y sigue tratando de recuperar esa buena racha que mantuvieron durante las primeras tres jornadas.

Los goles del cuadro de Monterrey corrieron a cargo de Carlee Giammona, Christina Burkenroad y Chinwendu Ihezuo. Seis tiros de esquina para las visitantes y ninguno para las locales. La asistencia total en el Coloso de Santa Úrsula fue de 2774 asistentes.