Darina es una madre de familia con 2 hijos, quien debido al alto pago de transporte público y tras padecer las inclemencias de usarlo, decidió dejar su casa y rentar una más cerca de donde trabaja y sus hijos van a la escuela, por lo que el actual aumento que piden los transportistas se le hace una exageración, además de que es impagable para su familia.
“Donde vivía no pagaba renta, pero si gastaba 2000 de transporte a la quincena, al cambiarme de casa pago renta, pero estoy más cerca del trabajo. Otra razón fue el tiempo de traslados porque donde vivía las rutas pasaban llenas y teníamos que esperar a ver cuál si nos recogía”, relató.
Hace un año, para compensar el pago de la renta, decidió dejar de usar el transporte público y caminar cerca de 25 minutos diarios en cada trayecto para ahorrar dinero.
Darina vivía con sus hijos en Misión San José 2, pasando Chapulco, por lo que pagaba cerca de 2000 pesos de pasaje quincenal solo para ir a trabajar y a la escuela cerca de San José Mayorazgo.
Al hacer cuentas pagaba 4000 mil pesos de transporte público únicamente para cubrir sus necesidades básicas, más el gasto que tenía que cubrir si salía los fines de semana o hacía algún otro trámite.
Por ello, decidió buscar una casa cerca de la Laguna de San Baltazar, lo que le acercó a su trabajo y escuela de sus hijos, y aunque representó un pago de renta, compensa su gasto y mejora sus tiempos de traslado.
La joven relató que antes también tenía que lidiar con que las unidades iban muy llenas y no siempre los levantaba.
Explicó que ahora, no lidia con el malhumor de conductores, ni padece las carreras, que echan entre ellos ni viaja de forma apretada en las unidades.
Por lo que el aumento de tarifa, que piden los transportistas a 19 pesos, le parece una exageración y aunque podría aumentar sus trayectos a pie, también aseveró que en caso de ser necesario preferiría pagar plataformas de servicio particular.
“Diario de pasajes pagaríamos 51 pesos si no camináramos, si lo subieran serían aproximadamente 120 y para eso mejor pago un Uber, me saldría a razón de lo mismo, a mi en lo personal sí se me hace una exageración”, reconoció.
La mujer aseveró que si quisieran un aumento del transporte público lo podría pagar hasta en 10 pesos por trayecto.
El domingo, el gobernador Sergio Salomón Céspedes informó que se siguen manteniendo las mesas de trabajo con los transportistas para llegar a un acuerdo sobre el aumento que piden.
Además, negó que haya dicho que Alejandro Armenta Mier, gobernador electo, sea quien fijará el aumento de tarifa.
Por su parte, José Luis R., conductor de la ruta 55, afirmó que el aumento es necesario para que ellos puedan cubrir sus gastos de gasolina, pago de cuenta y tengan un salario digno.
“Se quejan de que queremos aumento, pero no se ponen a ver que apenas y sale para nosotros porque hay que pagar la cuenta y nosotros nos llevamos nuestras buenas asoleadas y andamos todo el día en el tráfico”, apuntó.