Durante los meses de abril y mayo, poco más de siete mil estudiantes mexicanos aplicarán la Prueba PISA, la evaluación internacional que impulsa la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), para medir los conocimientos y el desempeño de los alumnos en lectura, matemáticas y ciencias.
Retomar la aplicación de este examen en el país servirá para conocer aquellos esquemas de aprendizaje que deban fortalecerse, aunque no definirá el impacto de la implementación del modelo de la Nueva Escuela Mexicana, aseguró Patricia Vázquez del Mercado, presidenta ejecutiva de la organización Mexicanos Primero.
“Yo creo que todavía es muy pronto para atribuirle la mejora o no de aprendizaje de los estudiantes al nuevo modelo educativo. Primero, porque no ha tenido el énfasis de desconectarse totalmente del sistema establecido y, segundo, porque toma tiempo la consolidación de un nuevo modelo educativo. Creo que a partir de lo que resulte se debe impulsar un mejor sistema de aprendizaje y hacer énfasis en las áreas eje para formar a estudiantes con mejores competencias académicas, mejores competencias de lenguas, comunicación o mejores competencias científicas”, comentó en entrevista para 24 HORAS.
Vázquez del Mercado recordó que México es uno de los 85 países en donde se aplicará la prueba. En el caso de nuestro país, la muestra es de siete mil estudiantes con 15 años cumplidos, tanto de escuelas públicas como privadas, elegidos de manera aleatoria en todos los estados de la República, a quienes este año se les aplicará la evaluación de una asignatura invitada: uso de tecnología en la educación.
“Estos resultados siempre son nacionales, en caso de que un estado requiera los resultados específicos existe un proceso y costo extra que debe cubrir el gobernador, por la sobremuestra que requiere, pero la aprobación está sujeta al visto bueno de la Secretaría de Educación federal, pero al ser un costo económico muy elevado, casi nadie lo pide”, señaló la presidenta de Mexicanos Primero, al estimar que los resultados de la evaluación se conocerán hasta diciembre de 2026.
Cabe señalar que México ha participado en esta evaluación desde el año 2000 y, hasta ahora, se ha aplicado cada tres años. Sin embargo, a partir de 2025, la periodicidad cambiará a cuatro años.
En cuanto a los resultados, la última evaluación que se dio a conocer en 2022 colocó a México en el lugar 35 de 37 países de la OCDE, con un puntaje promedio de 407, mientras que la media fue de 478 puntos, mostrando debilidad en el aprendizaje en las áreas de matemáticas y lenguaje.