La incertidumbre sobre aranceles que impondrá Estados Unidos a México mantiene en vilo al sector automotriz. Seis empresas de autopartes en Puebla frenaron sus planes de inversión, reveló Carlos Sosa, presidente de Canacintra.
El directivo advirtió que la demora en definir la política comercial afecta la competitividad. "Hay empresas en stand by; esperan claridad antes de reactivar proyectos", explicó. El sector emplea a miles y es clave para la economía local.
Aunque no hay cierres de plantas ni despidos masivos, la amenaza es latente. Sosa anticipó que, sin solución en dos meses, vendrían paros técnicos y ajustes de personal. La prudencia empresarial refleja el miedo a perder mercados.
Stellantis, fabricante de vehículos, ya redujo su producción. Esto impactó a proveedores como Magna Autotek, que anunció paros temporales. La cadena de valor sufre: cada eslabón depende de decisiones geopolíticas.
El comercio bilateral está en juego. México exporta $60 mil millones en autopartes anuales a EU. Puebla, con su clúster automotriz, es especialmente vulnerable. La industria pide certeza jurídica para evitar más daños.