Uno de los ataques más devastadores desde 2022 golpeó Kiev, dejando 14 personas muertas. Zelenski calificó la jornada como “la más horrible” desde el inicio de la guerra.
Un bombardeo ruso en Kiev causó 14 muertes, incluido un ciudadano estadounidense, en uno de los ataques más destructivos desde el inicio de la invasión rusa en febrero de 2022.
Según el presidente Volodimir Zelenski, fue uno de los episodios “más horribles” vividos por la capital. Equipos de emergencia siguen trabajando entre los escombros de edificios destruidos.
El Ministerio del Interior de Ucrania informó que 27 puntos de la ciudad fueron impactados, incluidos hogares, escuelas e infraestructura crítica, elevando el nivel de devastación.
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En el distrito de Solomianski, un estadounidense de 62 años perdió la vida. Además, 13 personas resultaron heridas en un ataque paralelo en la ciudad portuaria de Odesa.
De acuerdo con Zelenski, más de 440 drones y 32 misiles fueron lanzados durante el operativo. Cientos de personas buscaron refugio en estaciones del metro.
“Fue la noche más infernal que recuerdo”, declaró Alina Shtompel, estudiante de 20 años. Muchos habitantes pasaron la noche con sus mascotas en los refugios.
Mientras tanto, Moscú aseguró que el ataque fue dirigido contra instalaciones de la industria militar ucraniana. También se restringieron vuelos en cuatro aeropuertos de la capital rusa.
Este nuevo ataque se da en medio de un estancamiento diplomático. Estados Unidos ha intentado mediar un alto al fuego, sin resultados. Rusia rechaza condiciones impuestas por Kiev y sus aliados.
Finalmente, una reunión entre Zelenski y Donald Trump, prevista durante la cumbre del G7 en Canadá, fue cancelada por la situación en Medio Oriente.
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