Debido a las afectaciones provocadas por la tromba que azotó localidades de los municipios de Izúcar de Matamoros y Tepeojuma el pasado 3 de junio, 21 casas serán reubicadas por el riesgo de colapso.
Así lo informó el titular de Protección Civil estatal, Bernabé López Santos, quien explicó que, tras una serie de trabajos de limpieza y remoción de escombros en la zona de desastre, se detectó que los inmuebles son inhabitables.
Lo anterior, porque las viviendas estaban asentadas en el margen de barrancas, por ello adelantó que la administración estatal buscará un predio para construir 21 pies de casas, siempre y cuando los damnificados acepten la reubicación.
"Estamos dispuestos a apoyarles con la construcción de su pie de casa. Hay que conseguir un terreno, pero es necesario que los vecinos acepten el cambio porque viven en la orilla de una barranca y una crecida arrastra no solamente los muebles, a veces se lleva a un familiar", dijo el gobernador Alejandro Armenta a los afectados.
Al respecto, el secretario de Bienestar estatal, Javier Aquino Limón, reveló que la dependencia detectó daños en 17 viviendas más, principalmente en sus muros, por lo que abrió la posibilidad de intervenirlas a través del programa de Obra Comunitaria con el cual también se podrá adoquinar calles afectadas.
Por su parte, la titular de Agricultura y Desarrollo Rural, Ana Laura Altamirano Pérez, adelantó que tras el censo de daños el Gobierno de Puebla entregará ganado que perdió la vida durante la lluvia, así como otros insumos para que los afectados puedan sostenerse.
“Ya había caído el agua en otras ocasiones, pero ahora subió a dos metros allá en la casa. Me subí al techo de una vecina porque si no me lleva el agua. Me rescataron a las 3 de la mañana”, contó Cristina Solano, una damnificada.
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“Ya había caído el agua en otras ocasiones, pero ahora subió a dos metros allá en la casa. Me subí al techo de una vecina porque si no me lleva el agua. Me rescataron a las 3 de la mañana”