El asesinato del empresario Stanley Ho, de origen extranjero, ocurrido en Sonata la noche del viernes, exhibe la operación impune de bandas internacionales en zonas exclusivas de Puebla.
Según el titular de la Secretaría de Seguridad Pública, Francisco Sánchez González, el crimen fue perpetrado por una célula de robarelojes colombianos, con presencia activa en la zona de Angelópolis, donde se concentran comercios de lujo.
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El ataque ocurrió horas después de que Ho adquiriera un reloj Cartier de alta gama. Fue perseguido hasta el estacionamiento subterráneo de Solesta, donde fue interceptado por motoladrones. Al resistirse al asalto, recibió al menos dos impactos de bala.
Pese a ser trasladado con vida al Hospital Puebla, falleció cinco horas más tarde. Este hecho violento revela cómo las bandas extranjeras especializadas en robos selectivos están extendiendo sus redes en zonas residenciales de alta plusvalía.
La Secretaría de Seguridad anunció que se realizará un operativo conjunto con el municipio de San Andrés Cholula para reforzar la vigilancia. “Tenemos ya información previa sobre los agresores, misma que será analizada en el C5”, declaró Sánchez González.
Los agresores habrían seguido al empresario desde la plaza comercial Angelópolis hasta Sonata, lo que indica un patrón de vigilancia previa. El modus operandi coincide con otros casos registrados en Ciudad de México, donde operan bandas similares.
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