La cantante Katy Perry y el actor Orlando Bloom confirmaron su separación tras casi diez años de relación sentimental y el nacimiento de su hija Daisy Dove.
La noticia fue difundida mediante un comunicado enviado a US Weekly por los representantes de la pareja, quienes informaron que esta decisión fue tomada de manera paulatina y cordial.
“Durante los últimos meses hemos estado transformando nuestro vínculo para centrarnos en la crianza compartida y mantener un entorno familiar armonioso por el bien de nuestra hija”, se lee en el mensaje.
La declaración enfatiza que seguirán viéndose como familia, con una prioridad común: brindar amor, estabilidad y respeto mutuo a Daisy, de cuatro años.
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Aunque en redes sociales y alfombras rojas mostraron una imagen de unión, diversos medios señalaron que existían diferencias en sus agendas profesionales y formas de vida, las cuales habrían desgastado la relación.
Uno de los indicios que despertaron rumores sobre su separación fue la reciente conclusión de la residencia musical de Katy Perry en Las Vegas, etapa que marcó cambios significativos en su carrera.
Por otra parte, la ausencia de Katy en la boda de Jeff Bezos y Lauren Sánchez, a la que Bloom acudió solo, reforzó las especulaciones sobre un distanciamiento definitivo.
Perry y Bloom se conocieron en 2016 en una fiesta posterior a los Globos de Oro y se comprometieron el Día de San Valentín de 2019. Aunque nunca se casaron, en 2020 nació su hija.
La relación fue intermitente, con una separación en 2017 y una posterior reconciliación, hasta que finalmente anunciaron su ruptura de forma oficial.
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