El mandatario estatal indicó que presentará un decreto para devolver las facultades a los municipios de la Ciudad Modelo: Mazapiltepec, Rafael Lara Grajales, San José Chiapa, Nopalucan y Soltepec.

Por: Mario Galeana

Miguel Barbosa Huerta rindió protesta como gobernador constitucional de Puebla por los siguientes cinco años y, además de decretar el inicio de la Cuarta Transformación en el estado, reveló que la deuda de la entidad asciende a los 44 mil millones de pesos.

Durante su investidura ante el Congreso local, acusó que parte de esta deuda “no es legal” y, en consecuencia, anunció que se auditarán los recursos utilizados por los gobiernos estatales anteriores.

“Puebla necesita saber la verdad. Puebla reclama saber la verdad. Por eso he instruido a la Contraloría del estado para llevar a cabo auditorías a los gobiernos anteriores. Los poblanos vamos a conocer la verdad de todo y, si existen irregularidades, que espero no existan, habrá aplicación de la ley”, advirtió.

Anunció que en las próximas horas presentará un decreto para devolver todas las facultades de los municipios en la zona de incidencia de Audi —Mazapiltepec, Rafael Lara Grajales, San José Chiapa, Nopalucan y Soltepec—, mismas que fueron acaparadas por el gobierno del estado mediante la conformación del Organismo Público Descentralizado (OPD) Ciudad Modelo.

Aparejado con el discurso del presidente Andrés Manuel López Obrador, Barbosa Huerta adelantó que en los siguientes días todas las personas que estén detenidas por delitos del fuero común, pero “por causas y razones políticas”, obtendrán su libertad por decreto.

A su investidura acudió Olga Sánchez Cordero, secretaria de Gobernación, como representante del gobierno federal. También asistieron el presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política del Senado, Ricardo Monreal Ávila, además de senadores y diputados federales.

De igual forma, anunció la compra inmediata de mil patrullas, la contratación de más policías estatales y municipales que serán profesionalizados, además de la entrega de armamento y tecnología.

“Para mí, la inseguridad es un momento de realidad y no de percepción. Quien piense que la inseguridad es un asunto de percepción, mejor que diga que no puede (…) Yo seré —porque no voy a buscar con quien compartir la responsabilidad—, yo seré el responsable de la seguridad pública en mi estado”, manifestó.

Aseguró que no intervendrá en la vida interna de los partidos políticos ni en las organizaciones sociales, además de que su gobierno permitirá la crítica y la autocrítica.

El gobernador de Puebla buscó asirse a la figura de López Obrador, al que describió como “un gigante y un hombre de época”, y aseguró que su gobierno estará regido por los tres principales principios del movimiento obradorista: “no mentir, no robar y no traicionar”.

“Ese es el gobierno de la Cuarta Transformación en Puebla. Así vamos a gobernar los poderes públicos del estado. Así voy a establecer las guías para que el Poder Ejecutivo, el Poder Judicial, el Poder Legislativo, unamos esfuerzos y encontremos la ruta de lo que tiene que ser la Cuarta Transformación en nuestro estado”, convocó.

Prometió que no intervendrá ni influirá en las decisiones del Poder Judicial, además de que trabajará de manera coordinada con los integrantes del Congreso local.

Y adelantó que su gobierno será vanguardia en el desarrollo de políticas públicas que busquen poner fin a la desigualdad estructural entre hombres y mujeres.

UNA OPOSICIÓN DESDIBUJADA

Barbosa Huerta pronunció un discurso de más de 40 minutos durante una sesión solemne en la que la oposición se diluyó entre la ausencia de la coordinadora del PAN, Mónica Rodríguez Della Vecchia, quien justificó su inasistencia “por motivos personales”.

En voz del blanquiazul, el diputado Raúl Espinosa Martínez asumió que su partido será “una oposición reflexiva e inteligente”, y se limitó a criticar la decisión del gobernador de Puebla de borrar cualquier logotipo del morenovallismo impreso en las obras públicas del estado.

“Sentimos como propio el estupor de los poblanos de quienes están más preocupados con el color de los edificios que de resolver los problemas de salud, empleo y seguridad”, lanzó.

Los diputados Armando García Avendaño y Guadalupe Esquitín Lastiri, portavoces de las bancadas del PRD y Movimiento Ciudadano, respectivamente, se calificaron, en unísono, como una “oposición responsable” y dieron un voto de confianza al gobierno de Barbosa Huerta.

El legislador Javier Casique Zárate, representante del PRI, dijo que en su partido “queremos ubicarnos en el lado correcto de la historia” y se puso a disposición del gobernador para “construir el andamiaje institucional que le permita construir una institución que dé resultados”.

En tanto, el coordinador de la bancada de Morena, Gabriel Biestro Medinilla, hizo una breve relatoría de la carrera política de Barbosa Huerta, al que describió como un “miembro destacado de la historia política moderna de nuestro país”.

“No puedo más que felicitarlo y reconocerle. Felicitarlo porque tras una carrera política de izquierda llega a la titularidad del Ejecutivo; agradecerle porque nunca se apartó o se desanimó en esta lucha democrática. Es un ciudadano del cual me consta su probidad, su sentido humano y social, así como su gran compromiso para con el estado y sus municipios”, concluyó.