Por: Jaime Carrera
Foto: @AztecaNoticias
La delincuencia alcanzó a los recintos culturales e históricos de Puebla, tal es el caso del Museo Fuerte de Guadalupe ubicado en la calles Unidad Cívica 5 de Mayo y la avenida Ejército de Oriente en la zona histórica de los Fuertes de Loreto y Guadalupe, en donde la noche del 27 de diciembre dos sujetos encapuchados y armados se llevaron 16 monedas antiguas y tres sables.
De acuerdo con los primeros reportes, aunado a los objetos históricos sustraídos, los hampones se habrían llevado también el monitor con las grabaciones de las cámaras internas del recinto cultural, así como el celular de uno de los guardias de seguridad del museo. Hasta el momento, las autoridades estatales ni la Fiscalía General del Estado han brindado mayor información al respecto.
Fuentes extraoficiales señalaron a medios locales que, una vez que los amantes de lo ajeno se encontraban ya al interior del inmueble histórico, específicamente, en las bodegas del recinto, un elemento de seguridad privada acudió a ese punto, sin embargo resultó herido pues al abrir la puerta, uno de los asaltantes lo golpeó en la cabeza; tiempo después –y tardíamente– al lugar acudieron elementos de las policías municipal y estatal de Puebla.
Hasta el momento se desconoce el costo monetario de lo robado, así como también la forma en la que habrían ingresado los delincuentes al museo, pues de acuerdo a la versión del guardia de seguridad, las puertas del lugar se encontraban cerradas. Cabe mencionar que después del incidente delictivo, los elementos de seguridad pública implementaron un operativo de búsqueda sin lograr ubicar a los responsables.
Lo anterior, a pesar de ser una de las zonas con mayor vigilancia, pues en los Fuertes de Loreto y Guadalupe también se encuentran espacios turísticos como el Centro Expositor y de Convenciones, el Museo Regional del INAH, el Teleférico de Puebla y el Auditorio de la Reforma. De hecho, basta recordar que, este mismo año en julio, fue robada una de las dos águilas de bronce del mausoleo del general Ignacio Zaragoza, en la calzada que lleva el mismo nombre.