Una vez que concluya el confinamiento los establecimientos de alimentos y bebidas tienen el reto de recuperar la confianza de los consumidores, pues la actual crisis derivada por la pandemia del Covid-19, hará cuestionar con mayor frecuencia y seriedad a los comensales sobre lo que come y en dónde lo comerá, así lo informó José de Jesús Ojeda Hernández, catedrático de la Facultad de Gastronomía, de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP).
En videoconferencia el especialista indicó que los trabajadores del sector restaurantero deberán tomar cursos de seguridad e higiene, con el fin de saber el manejo de alimentos, así como medidas y protocolos de sanitización, monitoreo de personal operativo y distanciamiento social para seguridad de comensales y trabajadores.
Indicó que se deberá realizar una sanitización exhaustiva en el establecimiento antes de su apertura, la cual tiene que ser permanente, asimismo se tendrán que garantizar los insumos para el lavado y desinfección del lugar; asegurar la ventilación natural o mecánica y las superficies estar limpias para eliminar bacterias.
“Se tendrá que hacer una detección de personal que esté en los grupos de riesgo para garantizar su seguridad y descartar contagios en la apertura; se deberá capacitar al personal sobre la importancia del lavado de manos constante y se registrará su temperatura al ingreso a las instalaciones. Todos deberán evitar el saludo de manos o beso, así como el uso de celulares y deberán utilizar cubrebocas todo el tiempo”, indicó el catedrático.
Finalmente, dijo que en las entradas se recomienda la señalización, barreras físicas para entrada y salida de clientes, del personal y de los proveedores; así como hacer uso de tapetes sanitizantes o medidas similares.