México inició este viernes la repatriación de los 40 migrantes fallecidos por el incendio de un centro de detención en la norteña Ciudad Juárez, tras confirmar el arribo a su país de origen de una víctima colombiana, informó el gobierno.
La secretaría de Seguridad federal confirmó que el cuerpo de una persona llegó a Bogotá, mientras los restos de siete ciudadanos de El Salvador están “en traslado terrestre”, con acompañamiento de agentes de la Guardia Nacional.
“Se espera que este sábado estén cruzando la frontera por Chiapas”, estado sureño fronterizo con Guatemala, precisó la dependencia en un comunicado.
Respecto a los migrantes procedentes de Guatemala, el despacho de Seguridad indicó que “11 cuerpos han sido identificados y se tiene programado su traslado aéreo para la próxima semana”, según lo acordado con el gobierno de ese país.
Informó también que familiares de seis migrantes hondureños fallecidos están en proceso de identificación de los cuerpos y se programará un vuelo con destino a su país en una fecha que no fue precisada.
En tanto, autoridades de Venezuela indicaron que el próximo martes 11 de abril “llegará personal especializado en huellas para comprobar la identificación de personas”, añadió el comunicado de la secretaría.
Según el primer balance oficial, durante el siniestro -ocurrido el pasado 27 de marzo- fallecieron 39 personas: 18 guatemaltecos, siete salvadoreños, siete venezolanos, seis hondureños y un colombiano.
En el caso del cuadragésimo fallecido, quien murió luego de ser trasladado a un hospital de Ciudad de México, las autoridades no precisaron su nacionalidad.
De los lesionados, 14 se encuentran internados en diversos hospitales de Ciudad Juárez, cinco de ellos graves, mientras otros dos ya fueron dados de alta, según el reporte del despacho de Seguridad.
Otros nueve heridos son atendidos en dos hospitales de especialidad de la capital mexicana, adonde fueron trasladados debido a la gravedad de su situación, precisó el boletín.
Autoridades mexicanas confirmaron la semana pasada la captura del migrante señalado de provocar el incendio, quien fue detenido junto a otras cuatro personas: tres de ellas funcionarios del Instituto Nacional de Migración (INM) y un vigilante privado.
El sexto sospechoso, acusado por la fiscalía, es otro guardia privado que permanece prófugo.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha garantizado que el caso no quedará en la “impunidad”.