Una persona perdió la vida y once más quedaron heridas después de las tres explosiones ocurridas en San Pablo Xochimehuacán, Puebla, debido a una toma clandestina de gas.

Los hechos no quedarán impunes, afirmó el gobernador, Miguel Barbosa, en conferencia de prensa.

Afirmó que los responsables recibirán un castigo y que los familiares de la persona fallecida y los lesionados serán indemnizados, además de que serán reconstruidas las casas.

Destacó que hay finanzas sanas en su administración, lo que permitirá que la ayuda a los afectados sea inmediata.

Por su parte, el secretario de Salud, José Antonio Martínez García, detalló que cinco de los hospitalizados están graves –entre ellos tres intubados-, además de que seis tienen quemaduras de segundo y tercer grado.

También hay dos  mil personas evacuadas y tres albergues abiertos, dijo la secretaria de Gobernación, Ana Lucia Hill Mayoral.