Lamento decirles que los manifestantes ya le tomaron la medida a las autoridades, tanto municipales, estatales y federales.
En Puebla ya no necesitas hacer una marcha multitudinaria para llamar la atención. Solo basta un grupo reducido de personas, una razón o “pretexto” para que cierren una avenida, un bulevar o incluso una autopista sin que esto tenga consecuencias.
Al protestar en las vías públicas, los manifestantes ejercen su derecho a la libertad de expresión consagrado en el artículo 2º de nuestra Constitución Política, que reza lo siguiente: Toda persona tiene derecho a las libertades de información, opinión, expresión y difusión del pensamiento mediante la palabra oral o escrita o la imagen, por cualquier medio de comunicación social, sin previa autorización ni censura ni impedimento algunos, bajo las responsabilidades de ley (…)
No trato de invalidar la justificación de lo que motiva a las personas a manifestarse. Pero estamos de acuerdo que la autopista México-Puebla ya se volvió un objeto de chantaje para todos aquellos que tienen algo que exigir a las autoridades.
¿Eres libres de manifestarte? Sí.
Pero ¿Esa libertad te da derecho de afectar a otros ciudadanos? No.
El cierre la autopista no es cualquier cosa, bloquear esta ruta es prácticamente incomunicar el norte y el sur del país. Es paralizar el comercio entre ambos polos de nuestro territorio, detener el turismo hacia las playas del sureste y ya no hablemos de la pérdida millonaria de todo lo que va hacia el puerto de Veracruz.
No es momento de cerrar los ojos, cada vez son más los bloqueos a las principales vías de comunicación en nuestro estado. Si bien es un derecho constitucional manifestarse, las autoridades a estas alturas ya deberían establecer un protocolo de reacción para que la vida de miles de personas no se vea afectada por un problema que se puede solucionar dialogando.
A estas alturas, Puebla al igual que la Ciudad de México, tendrá que informar diariamente la agenda de manifestaciones y cierres de avenidas, de lo contrario las familias poblanas seguiremos pagando los platos rotos. ¿Usted qué opina?