Por: Guadalupe Juárez
Foto: Archivo Agencia EsImagen
Un año ha pasado desde la desaparición de Paulina Camargo Limón, periodo en el que familia, con recursos propios, continúa con la búsqueda del cuerpo en cada anfiteatro del país, sumergiéndose al mar de bases de datos al que los dejan acceder, recorriendo ríos y predios en donde puedan hallarla, organizando eventos donde la imagen de la joven de 19 años ha sido su estandarte.
Mientras las autoridades no han presentado resultados certeros sobre la investigación del caso, la defensa de su homicida confeso, José María Sosa Álvarez, busca conseguir su libertad a través de amparos al argumentar que no hay pruebas para que él siga detenido.
A 12 meses de que Paulina con cinco meses de embarazo fue vista por última vez, sus familiares han convertido sus plegarias por hallarla en gritos para que las autoridades estatales no dejen de buscarla y resuelvan pronto el entramado de su muerte.
“En mi vida pensé buscar a mi hija, cómo puedo decir que la estoy buscando muerta, hablar de su cadáver”, manifestó Rocío Limón, madre de Paulina, quien ha calificado los diversos señalamientos de la defensa de Sosa Álvarez-quienes han declarado que su familia ha obtenido beneficios por su desaparición- como una lucha mediática para lograr la libertad de quien fue la pareja de su hija y padre de su nieto.
El 25 de agosto del año pasado, Paulina desapareció después de reunirse con su exnovio y padre del bebé que la joven esperaba, según la línea de investigación de la FGE, Sosa Álvarez confesó haberla asesinado en su departamento y deshacerse del cuerpo en un contenedor de basura.
Meses después, la defensa argumentó violaciones al debido proceso y a sus derechos humanos al señalar que la confesión fue obtenida bajo tortura, sin que hayan presentado alguna queja en las instancias correspondientes.
La familia de Paulina Camargo ha anunciado la realización de una misa en la Iglesia de Huexotitla, así como una rodada el próximo viernes 26 de agosto denominada “Rodando por Pau” a las 19:00 horas, cuyo punto de partida es de Ciudad Universitaria a la Fiscalía General del Estado (FGE).
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