Ante la suspensión del servicio de hemodiálisis en hospitales de los municipios de Puebla, Tehuacán y Huauchinango, cientos de pacientes y familiares se manifestaron afuera de las respectivas instituciones de salud para exigir a la Secretaría de Salud del Estado una solución que les permita no pausar su tratamiento.


En la capital del estado, en el Hospital General del Sur, cerca de 120 pacientes y sus familiares bloquearon el Periférico Ecológico, a la altura de Agua Santa, para exigir que se reanuden los tratamientos de hemodiálisis, ya que el costo por sesión en una clínica particular oscila entre mil 800 y hasta 2 mil pesos.


“Lo que nos explicó el subdirector del hospital (Rogelio Olivos) es que se terminó el contrato con la empresa y la gente solo tomó sus cosas y se fue. Dicen que ni ellos estaban enterados. Ahorita, la solución que ya nos ha dado el gobernador Armenta, el secretario de Gobernación y el subdirector del hospital es que, a partir de mañana (2 de julio), nuestros pacientes serán colocados en otros lugares para recibir su tratamiento”, mencionó una de las familiares que protestaron.


El Hospital General del Sur de Puebla contaba con un contrato federal con la empresa Zdenko, la cual proporcionaba el servicio de hemodiálisis a 144 pacientes renales, quienes lo recibían entre dos y tres veces por semana.


Ante esta situación, la representante de la Asociación Enfermos Renales y Trasplantados de Puebla, Beatriz Adriana Rodríguez Bernal, hizo un llamado al gobernador del estado Alejandro Armenta Mier para no ignorar a los pacientes renales y garantizar su atención en hospitales públicos.

CRISIS EN TEHUACÁN Y HUAUCHINANGO
La crisis por la suspensión del servicio de hemodiálisis también se vivió en hospitales de los municipios de Tehuacán y Huauchinango.


En el Hospital General de Tehuacán, el servicio fue suspendido por la finalización del contrato con Zdenko, la empresa proveedora, afectando a 56 pacientes. Aunque los derechohabientes señalaron que el servicio general del nosocomio ya se había visto interrumpido, primero por falta de agua y también por problemas en el servicio eléctrico, por lo que ellos han tenido que cooperar económicamente para que su tratamiento no se vea afectado.


Mismo caso se vivió en el Hospital General de Huauchinango, en donde más de 40 pacientes se quedaron sin tratamiento. Según versiones de los afectados, este servicio se ofrecía en dos turnos a los pacientes actuales, además de contar con una lista de espera de más de 30 personas con diagnóstico de insuficiencia renal crónica.
Ante los tres casos, la Secretaría de Salud del Estado emitió un comunicado en el que señaló que se trabaja para restablecer el servicio de hemodiálisis.


“La suspensión del servicio ocurrió luego de que la empresa subrogada responsable notificara la finalización del contrato y procediera a retirarse”, indicó la dependencia estatal, reiterando que se trabaja en colaboración con la Federación para restablecer el servicio.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *