Un antiguo expediente de 114 fojas, recientemente hallado en el Archivo Judicial, revive uno de los acontecimientos históricos más importantes del país: la muerte de Aquiles Serdán Alatriste. Se trata de la denuncia por homicidio, robo y destrucción en propiedad ajena que en 1911 presentó la señora Filomena del Valle tras la muerte de su esposo, el precursor poblano de la Revolución Mexicana.
El documento no solo recoge la narrativa de los hechos, como la preparación armada del movimiento revolucionario y de quienes participaron en este, sino comprueba el papel que jugó Puebla en el escenario político nacional de esa época, destaca el secretario de Cultura, Sergio Vergara Berdejo.
La denuncia la presentó la señora Filomena contra el entonces Gobierno del Estado luego de haber salido de la cárcel, a la que ingresó el 21 de noviembre de 1910, periodo en el que nació Sara, la tercera hija del matrimonio, en cuyo bautizo participó Francisco I. Madero, abundó el director del Museo Regional de la Revolución Mexicana “Casa de los Hermanos Serdán”, Domingo Castillo.
EL RELATO DE LA ESPOSA DE LA VIUDA DE SERDÁN
La denuncia integrada en el expediente recientemente encontrado en las instalaciones del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), comenzó a integrarse el 24 de mayo de 1911; el caso fue atendido por el juez Celerino Flores.
En el documento la señora Filomena relata la forma en la que el 18 de noviembre de 1910, tropas militares ingresaron a su domicilio, (ubicado actualmente en la 6 Oriente 206, Centro Histórico) y dispararon contra las personas que se encontraban en el lugar, explicando que ella, así como la madre y hermana de Aquiles (Carmen Alatriste y Carmen Serdán) estaban a punto de ser víctimas de ese ataque.
“…que el día diez y ocho de Noviembre del año próximo pasado como a las siete y media de la mañana se presentó en mi casa habitación, calle de la Portería de Santa Clara número cuatro, el Jefe de la Policía Don Miguel Cabrera, acompañado del Mayor Modesto Fregoso y de varios agentes de la misma, con el fin de practicar un cateo de la casa”, se lee.
En el documento también se relata el momento en el que Serdán se ocultó por 15 horas en un agujero del suelo de su vivienda, para no ser atrapado por las fuerzas federales, mismas que al percatarse de un ruido que hizo, lo ubicaron y asesinaron.
“A eso de las dos de la mañana del día diez y nueve, entiendo que por algún movimiento que hizo y que no pudo impedir, pues llevaba en ese sitio semejante a una tumba quince horas, produjo ruido que alarmó a quienes guardaban la pieza”, relató la señora Filomena.
En este expediente figura el nombre de Juan Bede, un militar al que se le acusa de haber disparado contra quien habría iniciado en Puebla la rebelión maderista, no obstante, esta persona fue absuelta.
Debido al año de este suceso, el documento contiene dos ilustraciones (a color) de medicina forense, en las que se aprecia claramente el recorrido de las balas que le habrían quitado la vida a Aquiles Serdán.
La denuncia presentada por la esposa de dicho líder antirreeleccionista, estuvo plasmada en la edición del 24 de mayo de 1911 de “El País, diario católico”, cuyo encabezado reflejaba la crisis política que se vivía en ese entonces: “El General Díaz renunciará hoy la Presidencia y subirá al Poder el Lic. Francisco L. de la Barra”. Dicho periódico está incluido en este expediente en poder del Archivo Judicial, que almacena casos hasta de 1568.
“ES LA CASA DE LOS SERDÁN EL INICIO DE LA REVOLUCIÓN”: VERGARA BERDEJO
El año 1910 marcó la historia del país y de los mexicanos, dado que en ese entonces inició el movimiento que le dio paso a la Revolución Mexicana y este a su vez al fin del porfiriato; en estos sucesos Puebla jugó un papel importante a través del grupo social que encabezó Aquiles Serdán, resalta el secretario de Cultura, Sergio Vergara Berdejo.
Esta historia está incluida en la narrativa que forma parte del expediente integrado por el asesinato de Serdán, documento en el que se plasma que este grupo social se preparaba para iniciar la revuelta del día 20 de noviembre, explica.
“1910 fue un año importante para la vida de los mexicanos, 1910 empieza el movimiento de la Revolución. Mucha parte de la sociedad pide la renuncia de Porfirio Díaz dado que venían las elecciones y él se quería reelegir. Aparece un partido, el antirreeleccionista, y automáticamente aparecen grupos sociales y uno de los más importantes fue el de los Hermanos Serdán”, cuenta.
El final de este capítulo histórico nacional, que abarca la exoneración de quienes habían sido culpados por el asesinato de Aquiles, se revive cada año en Puebla, en donde las y los ciudadanos consideran que la Revolución inició en la casa de los hermanos Serdán.
“La historia quedó escrita y la historia se revive cada año en esta misma casa que para nosotros los poblanos es el inicio de la Revolución”, añade.
PRESENTA DENUNCIA LUEGO DE OBTENER SU LIBERTAD
Desde la denominada Sala del Sacrificio (en donde asesinaron a Serdán y donde actualmente se encuentran los restos de Carmen, Aquiles y Máximo), el director del Museo Regional de la Revolución Mexicana “Casa de los Hermanos Serdán”, Domingo Castillo, cuenta que el 21 de noviembre de 1910, Carmen Alatriste, Carmen Serdán Alatriste y Filomena del Valle (quien en ese entonces tenía seis meses de embarazo aproximadamente), fueron encarceladas.
Relata que la denuncia, cuyo expediente se encuentra en poder del TSJ, fue presentada por la viuda de Serdán cuando obtuvo su libertad, a fin de no dejar impune el asesinato del precursor poblano de la Revolución Mexicana.