Por Sommelier Michelle Carlín
El otro día leí un comentario de alguien por ahí, que decía; la comida con la copa de vino correcta hace que el vino explote en tu boca, y me pareció hilarante.
Porque en parte es cierto y en parte es ficción, si lo haces bien puede explotar en tu boca sin duda de forma figurada, pero si lo haces mal explotará justo en tu cara de forma literal.
El término "maridaje" seguramente alguna vez lo has escuchado y viene de la palabra mariage que significa matrimonio, y se trata de la unión entre dos elementos; en este caso vino y comida, es un término en extremo popular que ha cobrado mucha fuerza en los últimos años, y que hace que todos quienes han asistido alguna vez a una actividad de éstas, decidan intentarlo en casa.
Quisiera decir que el maridaje es algo que solo hacen los expertos con éxito, pero la realidad es que; el maridaje es tan subjetivo como las preferencias personales sobre cualquier cosa, y realmente se trata de una materia de prueba y error, que no sólo se remite a la unión de vino y comida, he escuchado maridaje con cerveza, aguas, café, té, infusiones, coctelería, destilados, e incluso alguna vez supe de un restaurante en la ciudad de México que proponía maridaje de alimentos con aguas frescas. Lo más curioso de todo es que hacemos maridaje todo el tiempo, ese chocolate con tu pan dulce favorito; es maridaje, esas carnitas con una cerveza; es maridaje, y lo hacemos porque uniendo esas cosas hacen que la experiencia sea aún más grata, la diferencia entre tú experiencia y los profesionales, es que nosotros nos ponemos a analizar la razón por la cual saben mejores esas cosas cuando las acompañamos así.
El maridaje es eso, unir elementos de forma consciente, y entender si funcionan o no y cual es la razón de su éxito o fracaso. Hay reglas, pero hay más excepciones a la regla que otra cosa, lo que si puedo decir es que hay dos tipos de maridaje fundamentales y estos son:
- A) Maridaje de acompañamiento o seguimiento: Es aquel que se basa en las características del otro, tratando de hallar puntos de unión entre sus similitudes, imagina un vino con toques cítricos como naranja, mandarina, limón, y algo de piña verde, todo esto acompañado de aromas de miel, para el maridaje pondremos una ensalada de verdes con supremas de naranja y piña asada aliñado con una vinagreta de base cítrica y miel, si te das cuenta hay elementos en ambos que se reflejan como un espejo en algún punto y ayuda a la armonía.
- B) Maridaje de contraste; Es aquel que se divierte con las diferencias, como aquellas cosas que ves juntas y no creerías que pudieran funcionar (¿Conchas con frijoles? ¿Huevos revueltos con catsup?), por ejemplo un vino dulce cosecha tardía con un queso azul, son sabores contrastantes que por alguna razón parece que funcionarán mal, pero cuando los unes en la boca de verdad son una explosión multisensorial.
Así que para el maridaje, lo que importa es tener;
1) Curiosidad por la experimentación
2) Bases de cocina
3) Bases en materia de vinos o la bebida que se quiera maridar
4) Tener la capacidad de análisis para practicar y entender lo que pasa y la razón por la que funciona o no, con la finalidad de repetirlo con éxito.
Por supuesto que hay cosas que tomar en cuenta pero si las dijera ahora sería predisponer la experiencia, aquí es como cuando te compran tu primera bicicleta, súbete y ponte a pedalear es la única forma de aprender, tal vez te caigas y regreses con las rodillas raspadas, pero tal vez no y sea una experiencia inigualable.
Lo importante es intentarlo. ¿No crees?
Dime entonces: ¿Que vas a maridar hoy?