Redacción
En la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, después de 21 años de experimentación en modelos animales, se descubrió que el zinc contribuye al nacimiento de las neuronas.
Lo anterior lo señaló Bertha Alicia León Chávez, investigadora de la Facultad de Ciencias Químicas (FCQ), titular de un proyecto de investigación con el cual se pretende conocer las cantidades de zinc que deben suministrarse en personas con enfermedades neurodegenerativas y cerebrovasculares, para disminuir sus efectos negativos.
Los investigadores comprobaron que el zinc induce factores de crecimiento de células del cerebro –aunque sólo en determinadas condiciones–, por lo que ahora buscan demostrar qué es lo que ocasiona la neurogénesis; es decir, indagan cuáles son las células precursoras de neuronas en el cerebro de los seres humanos.
Pese a las notables ventajas para la salud del cerebro, ya probadas por los científicos de la BUAP mediante modelos animales, León Chávez reconoció que este elemento químico también puede afectar la salud de las personas: “Si se administra de forma crónica, en algunos modelos se presentaron afectaciones, como fibrosis hepática. Por tal motivo, es fundamental conocer cuáles son las dosis óptimas, en qué momento y durante cuánto tiempo debe consumirse”.
Actualmente las investigaciones están por establecer la estrategia terapéutica o profiláctica que mantenga el efecto protector del elemento, pero sin a afectar la salud de los pacientes.