Muchos ojos de la 4T poblana han lanzado “buenas miradas” a la posibilidad de que Gilberto Higuera Bernal se convierta en el titular de la Fiscalía General del Estado (FGE), de la que es encargado de despacho desde septiembre de 2018. Una vez que el Congreso local terminó el proceso de inscripción, con 16 aspirantes, y todavía con la reserva de que pudiera existir una “carta oculta”, Higuera se ve como el más viable y hasta obvio, porque además garantiza salvar el escollo del fiscal carnal, en que han caído otras entidades, un personaje afín al mandatario, con anunciada dependencia a éste. Él, hay que recordarlo, viene del morenovallismo. También, por los apoyos que tiene en la FGR y porque, sin meterse en líos, se ha venido ganando la confianza de Casa Aguayo.
El proceso constitucional, en el que tiene facultad el gobernador de elegir una terna que luego será votada en el Legislativo, está en marcha y concluirá en breve.
Con la inscripción, junto con otros 15 aspirantes, del encargado de despacho de la FGE, Gilberto Higuera Bernal, ante el Congreso de Puebla, muchos dan ya por concluida la búsqueda de un fiscal General.
Voces y miradas suponen que no hay ya dudas y que será él quien ocupe la titularidad.
Sin embargo, en el recato de otros está la espera de la confirmación.
La única duda que con seguridad prevalece, sea o no él, es si el nuevo fiscal durará en su encargo los dos años que faltaban al periodo que dejó inconcluso al renunciar Víctor Carrancá, o va por los siete completos.
Esa discusión ya se ha planteado en el recinto legislativo del Centro Histórico y estará a la vista y resolución en los próximos días.
Sobre la designación del nuevo fiscal General, en el papel y en las circunstancias del estado, Higuera parece la decisión más sensata, lo mismo en lo político que en lo administrativo.
No es morenista.
No es panista.
No es barbosista.
Tiene una amplia carrera en la entonces Procuraduría General de la República (PGR).
También académica.
Y ahora mismo tiene, aparentemente, apoyos de muy alto nivel en la Fiscalía General de la República (FGR) de Alejandro Gertz Manero.
Allá, en el cuartel de la avenida Reforma en Ciudad de México, desde julio pasado su hermano, Alfredo Higuera Bernal, despacha como titular de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO).
Esa es considerada la posición de mayor poder luego del fiscal General de la República.
Además, aquí en Puebla, en su desempeño como encargado de la FGE, Gilberto Higuera ha venido dando resultados, sin generar escándalos.
Su bajo perfil mediático que lo muestra mesurado.
Sin filias con el pasado ni fobias con el presente.
Eso se ha visto bien en Casa Aguayo.
Y ahí, como en el Congreso, constitucionalmente se tomará la decisión.
En los próximos días la conoceremos.
BARBOSA, LIBRE Y SIN COMPROMISOS EN MORENA
Aunque la resolución del Congreso Nacional Extraordinario del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) tendrá aún impugnaciones ante el Instituto Nacional Electoral (INE), su decisión de destituir a Yeidckol Polevnsky Gurwitz como presidenta interina y nombrar una nueva dirigencia, también provisional, tiene consecuencias inmediatas y contundentes para Puebla.
En principio, el respaldo que el gobernador Miguel Barbosa Huerta y la fuerza del barbosismo le daban a la hoy defenestrada presidenta del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) ha quedado en libertad.
Sin fallar en los compromisos y en la lealtad, desde la mayoría morenista y desde el poder político poblano se apoyó a Yeidckol hasta el final y sin regateos.
Se pagó cada factura.
Los votos de los delegados nacionales barbosistas fueron para ella y su intención de permanecer al frente del partido.
Incluso, a contracorriente de la visión mayoritaria en el país, en Morena, y en Palacio Nacional.
Barbosa cumplió a cabalidad.
Apenas este sábado, en su cuenta de Twitter, el gobernador la felicitó con especial cariño por su cumpleaños:
“Hoy cumple años una mujer excepcional, de firmes convicciones de izquierda y compañera de lucha que ha dedicado su vida a trabajar por un país mejor. Felicidades, querida @yeidckol”.
Ella ni un “me gusta” le dio a la publicación.
¿Qué raro?
Estaría muy ocupada.
Luego del Congreso morenista de este domingo, ya sin fuerza y sin posibilidades, incluso con sus impugnaciones, que las habrá, Polevnsky ha quedado huérfana.
Y el barbosismo en el contexto nacional partidista, al fin libre.
La dirigencia interina que encabeza el diputado federal (en los próximos días ya con licencia) Alfonso Ramírez Cuéllar convocará en unos meses a elecciones estatutarias.
Habrá recomposición de fuerzas.
Y en ésta, el barbosismo tiene el cartel de “libre” en la solapa.
Jugará ahora sus cartas con entera soltura.